Ana Zegarra traiciona la voluntad del pueblo e insiste en reelección pese al rechazo ciudadano
ANA ZEGARRA TRAICIONA LA VOLUNTAD DEL PUEBLO E INSISTE EN REELECCIÓN PESE AL RECHAZO CIUDADANO
Pese al rotundo mensaje del referéndum contra la reelección de gobernadores y alcaldes, Ana Zegarra y Víctor Flores reactivan maniobra en el Congreso para evitar consulta popular sobre reforma constitucional.

El Congreso fracasó en aprobar reelección directa: solo 77 votos a favor
En una sesión decisiva, el Pleno del Congreso de la República no alcanzó los 87 votos necesarios para aprobar la reforma constitucional que buscaba restablecer la reelección inmediata de gobernadores regionales y alcaldes. El resultado final fue de 77 votos a favor, lo que obliga a que la propuesta sea sometida a un referéndum, según lo establece la Constitución.
Sin embargo, lo que debió ser el paso democrático hacia la voz del pueblo, ahora está siendo torpedeado por maniobras congresales que generan rechazo y sospechas.
Ana Zegarra y Víctor Flores buscan evitar el referéndum
Lejos de aceptar el veredicto del Congreso y del marco constitucional, los congresistas Ana Zegarra de Somos Perú y Víctor Flores del Fujimorismo han presentado una reconsideración de la votación. Esta estrategia busca forzar una nueva deliberación parlamentaria y evitar que la decisión pase a manos del pueblo mediante referéndum nacional.
Ambos pedidos aún están pendientes de resolución en el Pleno, pero han generado un profundo malestar en la ciudadanía, que ve en esta maniobra una burla a la voluntad popular y una muestra más del desconecte entre los representantes y la realidad nacional.

¿A quién sirve esta insistencia por la reelección?
La actitud de la congresista Ana Zegarra ha sido duramente cuestionada. Su insistencia en defender la reelección de autoridades regionales y locales va en contra del mandato claro que el pueblo expresó en el referéndum del 2018, donde se rechazó rotundamente la reelección inmediata de congresistas, alcaldes y gobernadores.
¿Qué motiva realmente a la congresista Zegarra?
¿Está trabajando por el bien común o defendiendo intereses personales, partidarios o de grupos de poder?
Estas preguntas circulan con fuerza en las calles y en redes sociales. La falta de transparencia y el escaso sustento técnico en su defensa de la reforma abren la puerta a especulaciones sobre intereses ocultos que nada tienen que ver con el bienestar de la ciudadanía.
Un Congreso sin conexión con el pueblo
El intento de revivir la reelección inmediata, pese al rechazo constitucional, evidencia la desconexión de varias bancadas del Congreso con las verdaderas prioridades nacionales. Agrupaciones como Fuerza Popular, Alianza para el Progreso, Perú Libre, Renovación Popular, Avanza País, Somos Perú y Honor y Democracia respaldaron esta reforma, ignorando que la ciudadanía ya se pronunció con claridad sobre el tema.
En vez de enfocarse en leyes que impulsen el desarrollo, mejoren los servicios públicos o combatan la corrupción, el Congreso está enfrascado en reabrir puertas que ya fueron cerradas por decisión popular.
El referéndum es un derecho democrático, no una amenaza
La posibilidad de un referéndum no debería ser vista como una traba, sino como una garantía democrática. Es el pueblo quien debe decidir si acepta o no los cambios constitucionales, especialmente cuando se trata de temas tan sensibles como la reelección de autoridades.
Evitar esta consulta ciudadana mediante maniobras parlamentarias deslegitima el proceso legislativo y socava la confianza en las instituciones. Además, sienta un peligroso precedente para futuras reformas, donde lo político y lo personal se impongan sobre la voluntad colectiva.
¿Dónde están los proyectos urgentes que el país necesita?
Frente a una crisis económica, inseguridad ciudadana creciente, desnutrición infantil y abandono de las zonas rurales, la insistencia en una reforma impopular como la reelección de autoridades solo refleja una agenda política desconectada de la realidad nacional.
¿No hay temas más importantes que legislar?
¿Por qué se prioriza un proyecto que favorece a una clase política desprestigiada, antes que a millones de peruanos que exigen salud, educación, empleo y justicia?
Ciudadanía vigilante y activa: la respuesta que merece el Congreso
La ciudadanía debe estar alerta. Lo que está en juego no es solo una reforma, sino el derecho a decidir, la autonomía del pueblo frente a decisiones legislativas que no lo representan.
Cada peruano y peruana debe exigir que se respete el resultado del Congreso: si no se logró la mayoría constitucional, el siguiente paso es el referéndum. No hay atajos.
La reelección no es prioridad del Perú
La historia reciente del país ha demostrado que la reelección inmediata de autoridades suele abrir la puerta a la corrupción, al clientelismo y al uso indebido del poder para perpetuarse en el cargo. No es casualidad que en el referéndum del 2018, la mayoría del pueblo peruano votó en contra de esta figura.
Por eso, resulta vergonzoso y despreciable que se use la tribuna política del Congreso para defender intereses personales o partidarios, mientras los verdaderos problemas del país siguen sin solución.